El Ministerio Público debe investigar la muerte del animal y dar con el responsable, quien deberá comparecer ante la justicia.
Cochabamba, (EL DIARIO).- La Gobernación de Cochabamba presentó ayer una denuncia formal ante el Ministerio Público por la muerte de un gato montés que la pasada semana fue victimado con un disparo en la cabeza por un comunario en el Municipio de Sacaba.
La directora de la Secretaría de la Madre Tierra, Cinthia Vargas, dijo que ahora es tuición del Ministerio Público investigar la muerte del animal y dar con el responsable, quien deberá comparecer ante la justicia.
“En el caso del tigrecillo se ha hecho la denuncia según corresponde a la normativa ante el Ministerio Público donde se debe investigar y dilucidar el tema”, informó.
Según Vargas, los animales que son una especie en peligro de extinción están protegidos por la Ley 1333 de Medio Ambiente, que en uno de sus artículos principales instruye a las autoridades y la sociedad civil la protección y preservación de la fauna y flora que existe en el país.
“La normativa es clara, hay protección para los animales de vida silvestre. La obligación de las autoridades es denunciar ante la instancia que corresponde cuando se da este tipo de hechos”, enfatizó.
En relación a la muerte de los más de 100 animales (ovejas, patos, gallinas, conejos) que se le atribuye al tigrecillo, sostuvo que no existe una normativa que instruya el pago de las pérdidas a los comunarios. Éstos deben llegar a acuerdos internos para reponerlos.
“No hay una instancia que vea realmente este tema de la reposición. Generalmente cuando sucede entre las comunidades, es ahí mismo donde se hace la reposición entre los propios comunarios”, aseguró.
Vargas insistió en que estos animales silvestres escaparon de su hábitat natural debido al cambio climático y las inundaciones que se registraron en la zona del Chapare. Los animales silvestres se encontrarían depredando y enseñando a sus crías a cazar para sobrevivir.
OTRO ATAQUE
En este marco, la madrugada del miércoles al interior de una granja, 17 conejos fueron encontrados muertos en la zona de Pairumani cerca del municipio de Quillacollo. Los comunarios del lugar nuevamente encontraron huellas que aparecieron marcadas en la tierra húmeda. La Policía movilizó a su personal que realiza rastrillajes en la zona. Recomendó a la población no matar a los animales y utilizar petardos para espantarlos.
“Por las características de las huellas es un animal de buen tamaño, puede atacar a los pobladores, lo mejor es espantarlo con ruidos”, manifestó uno de los policías.
Fuente: El Diario. Demandan a comunario que mató a gato montés.