Ambientalista advierte que actualmente hay entre 20 y 25 mil ejemplares alrededor del Ártico
El oso polar es, además, una variedad animal emblemática por su situación en la cima de la cadena alimenticia en el Ártico, el ‘superdepredador’ de la región, por lo que, lo que suceda con ella, tendrá repercusiones en las demás especies, añadió Vorontsova.
Recordó que en 1956 Rusia declaró la veda a la caza de osos polares y Noruega en 1973, y añadió que es el momento para que los otros países de la región aúnen esfuerzos en la protección de esta especie.
Dinamarca (por Groenlandia), Canadá y Estados Unidos también forman parte de la zona ártica donde habita el oso polar, amenazado además por el cambio climático y el deshielo en los polos, agregó la experta.
Según Vorontsova, esas naciones deben impulsar una estrecha colaboración para detener el comercio de esta especie y dijo que «es el momento justo» para que la Convención incluya a los osos polares en la lista de protección urgente y sostenida.
Unos 700 representantes de todo el mundo se reúnen desde este martes en Quito en la CMS, patrocinada por el Programa de Naciones Unidas para el Ambiente (PNUMA) y co-organizada por el Ministerio del Ambiente de Ecuador.
La Convención impulsa la conservación de 117 especies en peligro de extinción y promueve la restauración de sus hábitat para atenuar los obstáculos que se presentan en el proceso de migración y controlar otros factores que puedan ponerlas en peligro.
El encuentro en Quito concluirá el próximo domingo.